Recientemente la diócesis ha puesto en marcha un Centro de Orientación Familiar. En el último número de la revista Barca de Santiago se publica una interesante entrevista con su director, Luis García Bernadal.
Barca de Santiago: D. Julián te ha pedido que inicies el Centro de Orientación Familiar de la diócesis. ¿Podrías explicarnos que es un COF?
Luis García: El COF es un servicio que acoge y apoya a familias, y parejas o personas que necesiten ayuda en el ámbito familiar. Además, también puede ofrecer orientación específica en lo relativo a todos sus ciclos vitales.
B.de S.: ¿Te estás inspirando en otros COF que ya existen?
L. G.: Lógicamente estamos en contacto permanente con aquellos otros COF que nos ofrecen una experiencia más interesante. Participamos, además, en los encuentros de ámbito nacional que se organizan.
B.de S.: ¿Con qué recursos materiales y humanos cuentas?
L. G.: Verás, un COF no puede depender de una única persona, lo integramos un equipo de profesionales: psicólogos especialistas en terapia familiar, con formación específica tanto en orientación como en mediación familiar, abogados con sensibilidad y experiencia en este campo, trabajador social, médico para reconocer y promover factores de salud. Además, al estar encomendado a la Delegación de Pastoral Familiar, contamos con el apoyo de sus Delegados, que además de ser parte de su equipo directivo, están activamente comprometidos en este proyecto. Sus catequesis de preparación al matrimonio son un material de referencia para la diócesis y para este COF.
B.de S.: ¿Cuáles serán las actividades concretas que llevará a cabo el COF?
L. G.: En este año nos centraremos en dos objetivos muy concretos: dar a conocer este servicio para que la gente que nos necesite pueda contar con nosotros; y centrarnos en la acogida y ayuda a las familias, parejas y personas que estén pasando por momentos de dificultad. Con el tiempo, tenemos previsto ampliar los servicios.
B.de S.: ¿Cuál es la identidad que caracteriza a este COF?
L. G.: La de ser un servicio que desde la diócesis se presta a quien lo necesite, independientemente de su condición. Cuando lo dimos a conocer alguien nos dijo: Pero, entonces, ¿esto es como Cáritas? Pues sí, Cáritas sería un modelo en el que fijarnos y con quien colaboramos en la red de ayuda a las familias. Por otra parte, trabajamos para que sean las personas las auténticas protagonistas de sus vidas; por eso respetamos sus valores y creencias.
B.de S.: ¿Cómo podrán ponerse en contacto las familias con el COF?
L. G.: Llamándonos al 620 880 184 o bien enviándonos un correo a cofsantiago@archicompostela.org Nuestra sede está en Santiago y, gracias a la colaboración activa de Acción Católica, contamos con un amplio local en la calle Pexego de Arriba, 2.
B.de S.: ¿Cómo se financian vuestras actividades?
L. G.: El COF es un servicio gratuito. Nuestra opción es clara: quisimos que se diera a conocer a través de Cáritas pensando primero en la gente que no tiene recursos, aunque el servicio está abierto a todos. Todos los que integramos su equipo somos voluntarios. Como es lógico, el mantenimiento del servicio conlleva unos gastos. Contamos con la ayuda de la Delegación de Pastoral Familiar y, como ya dije, con el local y colaboración de Acción Católica. Con todo, a los usuarios les ofrecemos la posibilidad -si quieren o pueden- de colaborar con el Centro.
B.de S.: ¿No es difícil o costoso trabajar en un ámbito de dificultades?
L. G.: No es fácil, pero entendemos que nuestra fe cristiana tiene que concretarse en acogida y actitud de servicio; además contamos con las propias personas que acuden al Centro. Ellas son el mayor recurso; te sorprenderías de su capacidad para remontar sus dificultades.
me parece muy buena idea , y un buen trabajo , pero un centro de orientación familiar , sería necesario en todas las parroquias , pués hay mucha gente que tiene muchos problemas para desplazarse y normalmente siempre son los má afectados y los que más necesitan estos sevicios , gracias a todos los voluntarios y que Dios os bendiga a todos ,
es un gran servicio, pero cuesta que las parejas vallan. hay que seguir adelante. un abrazo jorge